5 consejos de salud laboral para conducir furgonetas en verano

Ante un verano en el que se pronostican temperaturas muy altas, tomar precauciones para protegerse del calor es algo tan necesario como obligatorio, en especial si estás trabajando. Hay que tomarse el sol muy en serio, sobre todo si trabajas en exterior. Por eso, hoy queremos refrescar tu memoria, y también tu jornada laboral, con algunos consejos básicos para conducir furgonetas de forma segura en la época más calurosa del año.

 

1. Ojo a la temperatura del motor de la furgoneta

El primer consejo se centra más bien en la salud de tu furgoneta: vigila la temperatura del motor. Los calentamientos, obviamente, son más frecuentes en verano. Recuerda que el indicador debe mantenerse entre los 90 y los 105 ºC. Las razones por las que la temperatura de nuestra furgoneta puede subir son muchas: pérdida de líquido refrigerante, obstrucción del radiador, bomba de agua desgastada… y no hay que descartar que el propio termostato esté averiado. Las retenciones de tráfico, tan habituales en verano, pueden sobrecalentar también el motor. 

 


2. Uso del aire acondicionado de la furgoneta sostenible… y saludable

Otro consejo que te lanzamos como expertos en el alquiler de furgonetas, turismos y todo tipo de vehículos en general es que no abuses del aire acondicionado, por grande que sea la tentación. En el calor del pleno agosto, todos queremos tener el coche fresco al instante, pero hay que tener un poco de paciencia. Bajar ventanillas a tope y la utilización de parasoles alivian mucho el proceso. En cuanto al aire acondicionado, se recomienda no descender de los 22 ºC. Es una forma de dañar menos el medio ambiente… y a ti mismo.

 


3. Planea descansos en tu ruta con furgoneta de alquiler

Si planeas alquilar una furgoneta para un trabajo puntual querrás, con toda probabilidad, apurar el tiempo y maximizar tu inversión en alquiler. Es lo más lógico del mundo. No obstante, esto no debe empujarte a dejar de respetar los debidos descansos. Con el calor del verano, la somnolencia se convierte en una amenaza real, sobre todo en las primeras horas de la tarde o después de comidas copiosas. ¿Sabías que la somnolencia está detrás de entre el 15% y el 30% de los accidentes de tráfico? Haz un buen uso del tiempo mediante la planificación, no sacrificando los necesarios periodos de reposo.


4. Alimentación al volante: muy importante

Directamente conectado con esto, te hablamos ahora de alimentación. Si debes conducir una furgoneta durante muchas horas por trabajo, ya sea en itinerario de reparto o por algún trayecto largo, evita las “comilonas”. Te aconsejamos menús ligeros, bajos en grasa y ricos en proteínas. Esto no solo como atenuante frente a la somnolencia y el calor, sino como hábito general que redundará, tanto a corto como a largo plazo, en beneficio para tu salud.

 


5. Protege tus ojos y piel al conducir tu furgoneta

Aunque a veces no lo percibamos, el sol nos afecta también cuando trabajamos en marcha con nuestra furgoneta. Los rayos UV inciden sobre nuestra piel a través del cristal. Por ello recurrir a protector solar en verano, e incluso en invierno, es una obligación. Por otra parte, para que la luz no reduzca tu capacidad de visión y reacción al volante, es recomendable el uso de gafas de sol con filtro inferior a cuatro, de ser posible de lente gris. Esto, además de seguridad, te proporciona protección para preservar tu vista.


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